Existen diferentes estudios científicos sobre los efectos de la música en las personas, sus beneficios para la salud y otros aspectos. También se ha investigado de manera más específica sobre lo que nos aporta cantar, a diferentes edades. Los resultados han reflejado que el canto es la práctica instrumental que más beneficios proporciona y el canto coral, la modalidad más beneficiosa para aquellos que la practican.
El canto ayuda a mantenerse en forma. Las respiraciones profundas que requiere su práctica mejoran la capacidad aeróbica y tonifican los músculos abdominales, intercostales y el diafragma. Además oxigena nuestros órganos, según estudios de la Universidad de Londres, que también han demostrado que la respiración profunda fortalece los pulmones y mejora la circulación sanguínea.
La actividad coral posee un alto poder terapéutico. Cantar en un coro puede ser considerado una especie de terapia social. Algunos estudios señalan que el canto produce una liberación de endorfinas, que repercuten de forma directa en nuestro estado de ánimo y proporcionan placer. Jordi Jauset, especialista en neurociencia musical, señala que cantar en un coro ayuda a construir una gran relación de confianza, de cohesión con los compañeros e incluso de generosidad. También indica que el canto aumenta los niveles de cortisol y oxitocina: hormonas que combaten el estrés, y refuerzan la autoconfianza y el nivel de bienestar personal, respectivamente.
La convivencia que se produce en un coro perfecciona las habilidades sociales y fomenta un comportamiento social con profundas connotaciones humanísticas. La incorporación del canto coral a los programas y centros de enseñanza debería producirse en todas las sociedades. Platón defendía que la educación para crear "buenos ciudadanos" se debía basar en el ejercicio físico y la música; y sobre todo, en el canto.
Alejado de toda competitividad, el canto coral enfatiza la responsabilidad, la disciplina, el orden y la constancia, pero también el compañerismo, la solidaridad, el respeto y la tolerancia. Cuántos valores consigue fomentar una única actividad, ¿no os parece?
Cantar en coro desarrolla la inteligencia y la cooperación ante la necesidad de saber escuchar otras voces, lo que también fortalece el sentido armónico. Se ha comprobado que esta actividad influye favorablemente en la bioquímica del cerebro, hasta tal punto que algunos científicos hablan de gimnasia neuronal, siendo capaz de mejorar la concentración y la memoria. También contribuye al aumento de la autoestima y de la creatividad.
Diversos estudios han concluido que el canto coral es muy saludable física y emocionalmente, para cualquier persona. Investigaciones de la Universidad de la Música y Arte de Viena han demostrado que su práctica refuerza y compensa la actividad de los nervios parasimpáticos, entre ellos el nervio vago, proporcionando tranquilidad, reforzando las defensas y mitigando trastornos de sueño. Por ello, defienden que esta actividad debería ser recetada por los médicos. La verdad es que cada vez más clínicas integran el canto y la música como herramienta de intervención en sus pacientes, como lo refleja la periodista científica Elena Bernard en un artículo publicado en 2015, en la revista Investigación y Ciencia.
Se ha verificado que el canto coral reduce la frecuencia cardiaca y los niveles de depresión, por lo que es una actividad indicada para personas aquejadas de alguna enfermedad o trastorno. Según las investigaciones de la Universidad de Frankfurt cantar fortalece el sistema inmunológico, pues al hacerlo aumentan los niveles en sangre de inmunoglobulina A, que es uno de los principales anticuerpos de nuestro organismo.
Jordi Jauset señala que el canto puede proteger de las enfermedades neurodegenerativas, ya que se ha demostrado que cantar oxigena el cerebro más de lo habitual y fortalece las fibras nerviosas. Un estudio de la Universidad de Canterbury, en Inglaterra, ha confirmado que cantar en grupo puede mejorar el tartamudeo, la capacidad pulmonar e incluso el Parkinson.
Científicos de la Universidad George Washington y de la Universidad de California, en Estados Unidos, han demostrado que cantar en coro es especialmente beneficioso para los mayores, mejorando su bienestar emocional al compartir parte de su tiempo con otras personas, y aumentar su círculo de amistades. Pero además, comprobaron que los mayores que practican el canto coral sufren menos depresión, hacen menos visitas al médico, toman menos medicamentos y tienen menos problemas de vista. Los resultados también mostraron una mejora considerable en su respiración, motricidad y coordinación, adquiriendo una postura más adecuada. Otras investigaciones han concluido que aquellas personas que han cantado en un coro a lo largo de su vida, disfrutan de un mejor envejecimiento.
Los estudios que han mostrado las conclusiones que acabo de exponer motivaron al Senado de España, por iniciativa de la Asociación Española de Directores de Coro - AEDCORO, a realizar una declaración institucional en marzo de 2018 reconociendo la actividad coral como bien cultural, así como sus beneficios individuales, y animando a practicarla. Este reconocimiento sin duda ha supuesto un hito para la música coral en nuestro país. Me siento muy orgulloso y afortunado por haber sido yo, como presidente de AEDCORO por aquel entonces, quien recogiese esta declaración de la mano del presidente del Senado.
El interés por los efectos de la música en las personas - y en particular del canto - ha aumentado en los últimos años, proliferando en este siglo XXI las investigaciones al respecto y las publicaciones en la prensa que reflejan sus resultados. Os dejo aquí solo un ejemplo.
Este post trata de los beneficios en general de cantar en un coro, con cierto detenimiento en lo que puede reportarles a las personas mayores, pero el tema da para mucho más abordando los beneficios de su práctica desde la infancia, o durante la adolescencia, si esta actividad se integrase en los currículos de Educación Infantil, Primaria y Secundaria. Os recomiendo que veáis el siguiente vídeo, en el que se condensan algunas de las ideas expuestas.
También podéis escuchar el podcast de mi sección HOY TENGO ENSAYO, en el programa "Leonor en la Noche" de Fórmula Hit Castellón, en el que expuse todo esto.
¿Ya cantas en un coro? o ¿has practicado el canto coral alguna vez? Entonces seguro que habrás experimentado mejoría en alguno de los aspectos que he comentado. Anímate y déjame un comentario al respecto. Me encantará leerte y te responderé con mucho gusto.
Referencias:
Alberto:Yo tuve la suerte de ingresar en un internado con 11 años,ser elegido cómo tenor entre 300 compañeros para el coro,y participar los domingos en conciertos que se hacian en Montoro,Pozoblanco,Montilla,Alcolea y en Córdoba.Dificultades con algunas asignaturas,y para no perder la beca que tenía,me obligaron a dejarlo a los 13 años.En uno de los momentos más difíciles de mi etapa laboral ingresé en el Coro de San Ignacio que dirigía el cura de Okendo,y permanecí 3 años dando testimonio aquí de que curó una gran depresión que sufría entonces.En mi prejubilación retomé mi interés por el canto hasta hoy y agradezco sinceramente que difundas los beneficios que aporta el canto coral.
ResponderEliminarHola Miguel Ángel, muchas gracias por tu comentario. Con tu amplia experiencia cantando en coros desde la infancia, habrás experimentado muchos de los beneficios que aquí comentaba. Sigue cultivando tu afición por el canto y disfrutando de esta maravillosa actividad.
EliminarAúpa Alberto ya sabes q mis comienzos fueron duros y con tu inestimable ayuda logré progresar algo y ahora disfruto y hago algún pinito q me anima bastante. Gracias por tu valiosa aportación en su momento
ResponderEliminar¡Hola! Muchas gracias a ti por tu comentario. Me alegra mucho haberte servido de ayuda y que hayas conseguido disfrutar del canto coral.
Eliminar